Prácticas para CANALIZAR

Sobre el entrenamiento 

La vida es un “Todo” integrado. La vida está interconectada, plantas, minerales, átomos, aire, energía solar y todo cuanto existe se entremezcla y están en constante movimiento y transformación. El Ser humano también está integrado a este Todo y contiene todos sus elementos, por lo tanto, es un reflejo de ello. La única realidad es la energía, la esencia de nuestra naturaleza es energética, somos un espíritu inmaterial animando un conjunto de huesos y carne que intenta descubrir su procedencia y la finalidad de su existencia.

Una de las maneras de tomar conciencia del espíritu es por medio de lo que llamamos intuición, pero no podemos hacerlo a través de los sentidos. La meditación, los sueños pueden ser una vía para conseguir tales intuiciones, la imaginación es una herramienta muy eficaz también para el mismo propósito. Todo ello debe ser cultivado.

El fenómeno de la “canalización” puede transmitirnos un doble mensaje. Podemos dar mensajes a través de palabras que provienen del canalizador pero que se presentan como presencias y entidades ajenas o separadas de nuestro cuerpo (ejercemos de médiums), esto si no sabemos discernir puede meternos en un gran problema. El contacto con seres de otros planos nos maravilla, pero, al no poder verificar la procedencia de los mensajes, no sabemos si los mensajes son adecuados o con qué tipo de entidad estamos tratando.

Después hay otro tipo de comunicación a nivel de nuestro propio canal, y es, a través de este que también podemos contactar con seres y entidades de otros planos, pero, de forma más segura, ya que no damos el poder de ceder nuestro cuerpo, sino que somos un canal de recepción de información y está en nosotros el aceptar sólo los mensajes de seres de Alta Frecuencia. A través de este tipo de comunicación también podemos recibir los mensajes de nuestro Yo Superior o Alma que son los más seguros y los que debemos fomentar en todo momento.

Ser un canal representa ejercer de fuente de transmisión psíquica y espiritual a través de diferentes modalidades como inspiración, intuición, profecías… y es una capacidad innata en todos nosotros, aunque no seamos conscientes de ello.

 “No me creas cuando digo que eres un espíritu, descúbrelo por ti mismo. No creas que tú eres un alma porque lo dicen todas las religiones del mundo, no has de depender de lo que cuentan los místicos al haberlo experimentado. Descúbrelo por ti mismo. Hasta que no hayas experimentado la realidad del espíritu por ti mismo, no será más que un concepto, una de tantas ideas”. Edgar Cayce